La climatología extrema en Irlanda ha obligado al cierre de todas las pistas propiedad de la IGB hasta el próximo viernes 15. Las pistas privadas, al parecer van a seguir el mismo camino. Además del propio peligro para los galgos, los desplazamientos de propietarios y entrenadores se convierten en muy peligrosos debido al hielo y la nieve de las carreteras. No recuerdan en las islas un invierno de la dureza del actual en muchos años. El próximo fin de semana, si el tiempo lo permite, se restablecerá la normalidad.